Desde niño sus sueños comenzaron a dibujarse en alas de la música que encontró en el paisaje de su tierra y su gente y aquella primera guitarra que puso en sus manos Don Elías Dujovne, le permitió emprender el camino del canto recorriendo las huellas de sus mayores como un mandato ancestral.
El creador de la milonga “La Primavera”, catalogado como el himno del folklore porque además se escucha en todo el mundo, supo de la amistad de Don Atahualpa Yupanqui, con quien compartió momentos que los marcaron en la dirección que ya había escogido para asumir la coherencia.
Entre sus temas compuestos algunos de los más conocidos son: “A don Linares Cardozo”, “Del talita”, “Este oficio de cantor”, “Por esto de andar cantando”, “Solar de los cardenales”, “Me dicen el panza verde”, “Gualeguay crecido”, “ De la costa”, “Este oficio de cantor”, además de chamarritas, canciones, milongas, chamarras y canto surero que son parte del repertorio elegido de manera constante en los contenidos de los programas de folklore.
En 1951, ya emigrado a Buenos Aires, debutaba en el programa “Voz Entrerriana” de Radio Rivadavia. Desde allí comienza a hacerse conocido y surgen actuaciones en distintos puntos del país. Ante las cámaras de Canal 7, intervino en el ciclo “El Patio de Jaime Dávalos” a fines de la década del 1950. Integró la espectacular compañía de bailes y canciones de Joaquín Pérez Fernández. En 1964 tuvo varias presentaciones exitosas en Uruguay y hasta un espacio en Canal 10, llamado “La Peña de Víctor Velázquez”. En 1966 regresó a su país, participó en “La semana de Santos Vega” y fue premiado como cantor y recitador.
En la década de 1970 realizó presentaciones con mucho éxito en Europa. Amigo de Don Atahualpa Yupanqui, comparten temas y momentos juntos. Luego del fallecimiento de Yupanqui, Velázquez parte a Japón a realizar presentaciones e inaugurar el “Templo Atahualpa Yupanqui”. Con posterioridad se presentaría en ciudades de Estados Unidos.
Actualmente reside en Rosario del Tala y junto a su esposa Ada transcurre los días en un tiempo de descanso de interminables recorridas por el país y el mundo. Allí constantemente ha recibido visitas de sus amigos, personas que lo admiran y querían conocerlo y también de medios de comunicación que siempre le dedican momentos recorriendo su prolífera trayectoria.
