La temporada de Avistaje de Fauna Marina y Costera ya es un éxito y continúa ofreciendo los mejores paisajes para disfrutar sobre más de 180 kilómetros sobre la imponente ruta escénica que une El Cóndor con Las Grutas.
Siendo este año una de las provincias más elegida del país por los y las turistas, la iniciativa es una de las actividades que tendrá protagonismo durante todo el año, dando un salto de calidad a todas las propuestas que se ofrecen en materia turística y económica.
El proyecto es coordinado por el ministerio de Turismo y Deporte junto a los municipios de Viedma y San Antonio Oeste con el objetivo de ampliar la oferta turística y dinamizar la economía regional, fortaleciendo la generación de empleo genuino.
A pesar de que esta es una actividad que se puede realizar todo el año, a partir de agosto es cuando comienza el momento pico en cuanto a cantidad de especies que se presentan en las costas rionegrinas, con la llegada de las ballenas al Golfo San Matías y las aves migratorias al Camino de la Costa, finalizando en octubre, por lo que estos son los meses elegidos como temporada alta de esta actividad.
Por la gran presencia de fauna y la poca actividad veraniega, es que estos meses son los ideales para contemplar la naturaleza de las playas en su estado más puro, con especies que decoran todo el Camino de la Costa, desde El Cóndor hasta Bahía Creek, una ruta escénica que se disfruta de forma ideal con el mar, los acantilados y la fauna marina y aviaria como compañía.
Un atractivo único para toda la familia
Sobre las playas del Camino de la Costa, se agrega el atractivo del gran afluente de aves migratorias que recibe la zona todos los años. Dentro de estas, podemos contar a la colonia de loros barranqueros más grande del mundo, ya que más de 175.000 ejemplares de esta ave eligen las barrancas que se encuentran en los primeros 12 kilómetros luego del Balneario El Cóndor para nidificar durante la primavera, por lo que le dan un especial ambiente al veraneo en las playas rionegrinas.
Además, la zona también hace de hogar para numerosas especies de aves migratorias que comienzan a llegar en esta época del año, como son los chorlitos playero rojizo blanco y de doble collar; los flamencos australes; los ostreros común y austral; y las gaviotas cangrejeras, cocineras, capucho café, sudamericanas y golondrinas, entre otros ejemplares.
Así también, a pocos kilómetros del Balneario, también se encuentra la Reserva Faunística Punta Bermeja, la cual es el hábitat de más de 4.000 lobos marinos de uno y dos pelos, lo cual la convierte en la reserva de este animal más importante del norte patagónico.
La función de este lugar es proteger a las especies durante el periodo de reproducción, entre noviembre y marzo, pero en el resto del año la Reserva está abierta para que los y las turistas se deleiten con la belleza de estos animales.