La administración anunció encuentros de hasta 60 personas con restricciones sonoras y ambientales. Leopoldo Lucas, presidente del Iturem, habló con Mensajero.
A través de la Resolución 460/2025 de la Administración de Parques Nacionales (APN), el Gobierno nacional oficializó un nuevo régimen para la realización de eventos privados de pequeña escala en el Parque Nacional Iguazú. La medida, que tendrá un carácter experimental por un año, busca dar un marco normativo a actividades que, aunque ya se realizaban, enfrentaban trabas burocráticas que demoraban su ejecución.
Para el sector turístico local, esta resolución representa un avance logístico fundamental. Leopoldo Lucas, presidente del Iturem, calificó la medida como “muy positiva”, destacando que el principal beneficio radica en la descentralización de las decisiones. Según Lucas, las solicitudes de eventos debían pasar anteriormente por instancias centrales que dilataban las confirmaciones durante meses. Con la nueva norma, la Intendencia del Parque Nacional Iguazú tendrá la facultad de emitir permisos de forma directa, facilitando una respuesta rápida a la creciente demanda de organizadores.
“Esto agiliza, facilita y ayuda a que se generen más eventos dentro del parque”, señaló el titular del Iturem, subrayando que la normativa no hace más que formalizar una práctica existente. Como ejemplo, Lucas mencionó que en sitios oficiales ya se ofrecen experiencias como cócteles en la Garganta del Diablo o intervenciones culturales —como recientes exhibiciones de tango— que conviven armoniosamente con el flujo habitual de visitantes.
El gobierno habilitó al Parque Nacional Iguazú a realizar eventos.
El desafío de la convivencia y el “Cero-Impacto”
Un punto central de la defensa de la medida es la nula afectación al turista convencional. La resolución establece que los microeventos deben realizarse con el parque abierto, sin restringir la circulación ni cerrar sectores. “En ningún momento se altera el funcionamiento del área; la gente puede disfrutar totalmente del Parque Nacional mientras otros realizan su evento”, explicó Lucas, reforzando la idea de que la infraestructura de uso público intensivo en Cataratas está preparada para esta bimodalidad.
Sin embargo, para garantizar que este incremento en la agilidad no devenga en un perjuicio ambiental, la APN impuso lím
La administración anunció encuentros de hasta 60 personas con restricciones sonoras y ambientales. Leopoldo Lucas, presidente del Iturem, habló con Mensajero.
lunes 22 de diciembre de 2025 14:48
A través de la Resolución 460/2025 de la Administración de Parques Nacionales (APN), el Gobierno nacional oficializó un nuevo régimen para la realización de eventos privados de pequeña escala en el Parque Nacional Iguazú. La medida, que tendrá un carácter experimental por un año, busca dar un marco normativo a actividades que, aunque ya se realizaban, enfrentaban trabas burocráticas que demoraban su ejecución.
Para el sector turístico local, esta resolución representa un avance logístico fundamental. Leopoldo Lucas, presidente del Iturem, calificó la medida como “muy positiva”, destacando que el principal beneficio radica en la descentralización de las decisiones. Según Lucas, las solicitudes de eventos debían pasar anteriormente por instancias centrales que dilataban las confirmaciones durante meses. Con la nueva norma, la Intendencia del Parque Nacional Iguazú tendrá la facultad de emitir permisos de forma directa, facilitando una respuesta rápida a la creciente demanda de organizadores.
“Esto agiliza, facilita y ayuda a que se generen más eventos dentro del parque”, señaló el titular del Iturem, subrayando que la normativa no hace más que formalizar una práctica existente. Como ejemplo, Lucas mencionó que en sitios oficiales ya se ofrecen experiencias como cócteles en la Garganta del Diablo o intervenciones culturales —como recientes exhibiciones de tango— que conviven armoniosamente con el flujo habitual de visitantes.
El gobierno habilitó al Parque Nacional Iguazú a realizar eventos.
El desafío de la convivencia y el “Cero-Impacto”
Un punto central de la defensa de la medida es la nula afectación al turista convencional. La resolución establece que los microeventos deben realizarse con el parque abierto, sin restringir la circulación ni cerrar sectores. “En ningún momento se altera el funcionamiento del área; la gente puede disfrutar totalmente del Parque Nacional mientras otros realizan su evento”, explicó Lucas, reforzando la idea de que la infraestructura de uso público intensivo en Cataratas está preparada para esta bimodalidad.
Sin embargo, para garantizar que este incremento en la agilidad no devenga en un perjuicio ambiental, la APN impuso límites estrictos bajo el concepto de “Cero-Impacto”:
- Aforo limitado: máximo de 60 participantes por actividad.
- Silencio natural: prohibición absoluta de amplificación sonora (los eventos artísticos deben realizarse sin música o con sistemas que no perturben el entorno).
- Gestión de residuos: obligación de retirar el 100% de los desechos y prohibición de plásticos de un solo uso.
Un año de prueba
Este nuevo esquema funcionará como una prueba piloto de doce meses. Al finalizar este periodo, la Intendencia deberá presentar un informe técnico de cierre. Este documento será el que determine si la agilización administrativa y la apertura a eventos privados son compatibles a largo plazo con la conservación de este Patrimonio de la Humanidad, o si el incremento en la frecuencia de las actividades requiere un ajuste en las restricciones vigentes.
ites estrictos bajo el concepto de “Cero-Impacto”:
- Aforo limitado: máximo de 60 participantes por actividad.
- Silencio natural: prohibición absoluta de amplificación sonora (los eventos artísticos deben realizarse sin música o con sistemas que no perturben el entorno).
- Gestión de residuos: obligación de retirar el 100% de los desechos y prohibición de plásticos de un solo uso.
Un año de prueba
Este nuevo esquema funcionará como una prueba piloto de doce meses. Al finalizar este periodo, la Intendencia deberá presentar un informe técnico de cierre. Este documento será el que determine si la agilización administrativa y la apertura a eventos privados son compatibles a largo plazo con la conservación de este Patrimonio de la Humanidad, o si el incremento en la frecuencia de las actividades requiere un ajuste en las restricciones vigentes.
Fuente : El Mensajero


