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Concluyó la votación ciudadana para elegir el nombre del séptimo yaguareté de la región chaqueña, registrado en la Reserva Natural Formosa. El nombre elegido, Tañhi Wuk, significa “dueño del monte” en idioma wichí, y recibió la mayor cantidad de votos entre las otras opciones propuestas.

Más de 6000 personas participaron en la votación, incluyendo estudiantes, docentes, vecinos de la zona y público en general. La iniciativa se desarrolló a través de una convocatoria online y visitando escuelas rurales: ocho (8) de la provincia del Chaco y nueve (9) de Formosa, como parte de actividades de educación ambiental y sensibilización sobre la importancia de la conservación del yaguareté.

Tañhi Wuk, el yaguareté macho adulto, fue registrado por primera vez en la Reserva Natural Formosa en marzo de 2022. Desde entonces, ha sido monitoreado a través de cámaras trampa y registros de personas de la zona, lo que ha permitido confirmar su presencia y obtener información valiosa sobre su comportamiento.

La elección de Tañhi Wuk no solo representa un nombre para este ejemplar, sino que también simboliza la unión de la comunidad con la conservación del yaguareté, especie declarada Monumento Natural y lo esencial de su presencia en los ciclos naturales del monte chaqueño.

La iniciativa de nombrar al yaguareté fue posible gracias al trabajo conjunto de Proyecto Yaguareté (CeIBA-CONICET), la Administración de Parques Nacionales, el Ministerio de la Producción y Ambiente de Formosa, la subsecretaría de Ambiente de Chaco y Fundación Vida Silvestre Argentina.

La presencia de Tañhi Wuk en la Reserva Natural Formosa refleja los esfuerzos que se realizan a diario para la conservación de la naturaleza en las áreas protegidas del país, así como también lo relevante de proteger especies claves para el ecosistema.

¿Cuál es el trabajo de la Fundación Vida Silvestre Argentina para preservar la especie?
En Fundación Vida Silvestre trabajamos en estrategias integrales de conservación que abarcan varias de las ecorregiones argentinas y que incluyen acciones para mitigar amenazas prioritarias que afectan diversas especies que forman parte de estos ecosistemas. En relación a nuestros objetivos de conservación, y a la situación de algunas de ellas, definimos seis especies como prioritarias para nuestro trabajo: una de ellas es el yaguareté, especie emblemática, monumento natural de la Argentina y en peligro crítico de extinción en nuestro país.

Situación del yaguareté en el Gran Chaco         
El yaguareté ha sido perseguido por distintas causas: por temor, por la costumbre de cazarlo, por prestigio o, en ocasiones, para evitar la posible depredación del ganado doméstico. Esta situación, en conjunto con la degradación y transformación de los bosques nativos por las actividades humanas, que a su vez genera la pérdida de sus presas naturales, puso al yaguareté al borde de su extinción en la Argentina. Por ello, hoy ya no es sencillo encontrarlo en el Gran Chaco. La población de yaguaretés en esta región es la más amenazada del país. Se estima que quedan menos de 20 individuos distribuidos entre las provincias de Chaco, Formosa, Salta y Santiago del Estero. Como el mayor depredador del monte, el yaguareté cumple un rol ecológico fundamental regulando las poblaciones de otros vertebrados, especialmente de los grandes herbívoros.

Desde Vida Silvestre trabajamos en la región chaqueña ya que se trata del área con las mayores tasas de deforestación y conversión de ambientes naturales del país, lo que pone en riesgo la conservación de especies como el yaguareté. Junto a otras organizaciones del territorio, acompañamos la ejecución de un plan de emergencia para la recuperación de la población chaqueña de yaguaretés. Además, en conjunto con Bolivia, Brasil y Paraguay, trabajamos en una iniciativa que tiene como objetivo proteger, gestionar y restaurar la conectividad ecológica en el Paisaje Pantanal-Gran Chaco y que tiene al yaguareté como especie paraguas.