(4-06-2022).-Doña Damiana sentía las cuerdas de la guitarra y escuchaba un susurro en su vientre materno. Algo le decía esa vida por nacer. Algo más que un pan debajo del brazo ofrecería ese niño al pronunciar sus primeras notas de llanto en el otoño de 1931.
Esa madre acunaba el destino de “La primavera”, de una vida llena de prodigiosas creaciones en guitarra y canto, con fundamento y compromiso, sintiendo la empatía del ser nacional y continental, asumiendo el legado de Don Atahualpa Yupanqui y uniendo rumbos de Jaime (Dávalos).
Hace 91 años nacía Víctor Velázquez un verdadero exponente de nuestra cultura que marca un rumbo de coherencia en su camino plagado de rumbos. Siempre con el norte de su destino; decir lo que se siente y lo que sienten “los de abajo”.
Era otoño y asomaba ese invierno crudo de las heladas, por eso nació curtido, para enfrentar las adversidades y soportar esa persecución de la censura poniendo su cuerpo como tantos cantores y músicos, con compromiso, al que no pudieron callar.
Su gesto en la expresión permanente: -“Hermano”-, le abrieron los brazos de tantos hombres, mujeres y niños que admiran su obra sintetizada en una milonga surgida en tiempos de búsqueda profunda en su ser. Fue tanta la necesidad de entrega que nació este paisaje musical provocando que el cuerpo y alma puedan traducirse a través de un instrumento fiel, como la guitarra, en una creación que cruzó las fronteras para anidar en corazones lejanos en distancias, aunque cercanos en el sentimiento.
Este cumpleaños suma incontables expresiones de admiración y respeto de sus pares y de quienes siguen buscando y encontrando que, como lo dicen los versos de Antonio Machado que repite Don Víctor como sentencia: “Moneda que está en la mano tal vez se deba guardar, pero la que está en el alma se pierde si no se da”.
Feliz cumpleaños Don Víctor.
Fuente : AP Noticias- Villaguay – Entre Ríos
