(28-03-2013)-.En Semana Santa una de las cosas que más se disfruta, además de los festejos religiosos, es tradicionalmente la oportunidad de tomarse unos días de descanso en familia, en busca de una total armonía y relajación en pleno contacto con la naturaleza. A 120 Km. de la ruta nacional Nº 3, se encuentra Puerto Deseado, un destino ávido de ser visitado.
El mismo propone, una amplia oferta gastronómica en pescados y mariscos e innumerables paseos y actividades que prometen sorprenderlo, turismo aventura, observación de aves, trekking, cabalgatas, excursiones náuticas por los diversos circuitos costeros, encontrando a su paso cañadones, sitios de pesca y de recreación.
La cocina patagónica, especialmente la costera, tiene a los mariscos como materia principal de su gastronomía. Es así como en Puerto Deseado se pueden encontrar platos a base de langostinos, mejillones, calamares y pulpos por nombrar algunos. Pero tampoco tenemos que olvidarnos de la exquisita variedad de peces como la merluza negra, abadejo, pejerrey, etc.
La actividad pesquera que se realiza en esta ciudad, permite a los prestadores de servicios gastronómicos, el poder acceder al fruto de mar con mejor textura, así como color y sabor, siendo típico
Lo imperdible es navegar por la espectacular Ría Deseado, recorrerla de punta a punta y observar desde las embarcaciones los acantilados que rodean su costa en ambos márgenes, la cual alberga gran biodiversidad de especies como el pingüino de Magallanes, cormoranes, lobos marinos, toninas overas y mucha fauna más se concentran en el reservorio más importante de Sudamérica.
En Puerto Deseado se encuentra el Parque Ínterjurisdiccional Marino “Isla Pingüino”, donde se destaca la única colonia, en toda la costa patagónica, del flamante pingüino de penacho amarillo. Por esta razón, la isla es uno de los lugares más visitados, ya que también se encuentran en ella otras especies de aves y mamíferos marinos, quienes ofrecen al visitante un exclusivo espectáculo en el que el protagonista es Usted.
Un Museo bajo el agua: casi intacta, desde 1770 la Corbeta Swift, una pequeña nave de guerra británica que en el siglo XVIII, se hizo conocida por frecuentar mares del sur duerme hundida a 100 metros de la costa. Varios objetos se rescataron del fondo del mar en extraordinario estado de preservación, en impecables vitrinas, se puede observar un reloj de arena, las viejas botellas de ginebra que alimentaban las fiestas de marineros e innumerables vasijas de porcelana, tazones y platos con el más refinado estilo ingles.
Las vías del recuerdo, dieron origen a la ciudad de Puerto Deseado, y la unían con Colonia Las Heras. Desde el cierre del ramal ferroviario en 1978 los incansables trabajadores ferroviarios han luchado por su reapertura y por la conservación de ese espíritu ferroviario tan particular del lugar, el que hasta su cierre constituyó una institución central para la vida social y la actividad económica local. Hoy en día esta memoriosa Estación cuenta con un Museo Ferroviario, el cual ofrece un perfecto recorrido por la historia del ramal, sus personajes, sus anécdotas, los instrumentos de comunicación de aquella época, entre muchos otros atractivos.